Un hogar verdadero es un santuario, un lugar de paz natural,
Un hogar es una residencia compartida donde todos sienten un sentido de pertenencia.
La Familia de la Humanidad pertenece a la Casa Eterna de Luz. Esta Casa ha sido llamada Nirvana,
La Tierra de Liberación, el Hogar de Serenidad.
Cualquiera sean los nombres, la Humanidad añora aquel lugar puro de paz y liberación. Con nuestros pensamientos podemos volver a ese Hogar y experimentar este santuario eterno.
Nuestro Hogar nos recarga, es refrescante y totalmente liberador llegar allá, mientras actuamos sobre este escenario del mundo.
Si me conecto a mi Hogar, puedo dejar de ser emocional. Dejar de estar atrapado por las inseguridades del ser estrecho de las etiquetas, relaciones, roles que desempeño o logros temporales.
Todas esas agotadoras decepciones personales quedan atrás cuando me conecto con mi yo original en el Hogar Original, con el Amigo Original, el siempre-comprensivo Padre Supremo en el Mundo Original de Luz.
Me siento sereno, soy libre.